En nuestros colegios aprendemos muchas cosas: mates, lengua, arte...pero también a ser personas, a que el día de mañana seamos grandes profesionales, pero sobre todo PERSONAS. Por eso, todo lo que hacemos en el colegio no cae en saco roto. En nuestros colegios queremos que todo lo que aprenden los niños, lo sepan aplicar a su vida diaria. Para ello, todo lo que nuestros artistas aprenden pasa por su momento de reflexión. Y reflexión, así en negrita y subrayado. Porque no vale sólo con aprobar. El alumno ha de ser consciente de lo que aprende y de cómo lo aprende. Ha de saber dónde tiene que profundizar y sus logros conseguidos. Para esto nuestros niños tienen este portfolio que hemos diseñado para ellos y para este proyecto. ¡Es tanto lo que están aprendiendo! que no puede quedarse en el olvido. Lo que más nos llena de orgullo es saber que todo lo aprendido en este proyecto junto a nuestros profesores, nuestros compañeros y los del otro colegio, que también son nuestros compañeros aunque estén a mil kilómetros, no lo van a olvidar nunca. Esto es lo mágico de nuestro trabajo, el ser conscientes de que gracias a nuestro esfuerzo, nuestros alumnos van a tener un mañana mejor.
GRACIAS CHICOS POR PERMITIRNOS AMAR NUESTRA PROFESIÓN. La única profesión que forma al resto de las profesiones.
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